El estado anímico en la forma de alimentarse y el comer en exceso ha sido algo ampliamente investigado, llegando a denominar a esta condición la “alimentación emocional”. Nos refirimos a aquellos comportamientos alimentarios más dominados por un determinado estado de ánimo, que por una necesidad biológica.
El síndrome de comedor nocturno, es una entidad que se caracteriza por presentar: anorexia matutina, hiperfagia nocturna e insomnio y cursa con variaciones en los patrones del sueño. Adicionalmente, algunos autores han propuesto la inclusión de 2 criterios adicionales: a) Ausencia del trastorno por atracón o comedor compulsivo y b) Duración de los síntomas descritos por más de tres semanas. La exacerbación de la sintomatología coincide con períodos de ganancia de peso y episodios de vida estresante.