Tras una intervención aparecen dudas y se crean expectativas. Más allá de las emociones y miedos que aparecen en el proceso de una cirugía de obesidad, los equipos médicos y multidisciplinares deben apoyar a los pacientes y acompañarles para aclarar las dudas y definir las expectativas realies que deben en la pérdida de peso tras una intervención. Contribuir a afrontar los cambios que vamos a seguir en los siguientes meses es fundamental.
Los resultados en la consecución de la pérdida de peso tras una cirugía de la obesidad son conocidos. Los resultados habitualmente se refieren a los que previsiblemente se consiguen en el medio plazo, Por supuesto, en los pacientes que, aprovechando la oportunidad que ofrece una cirugía, consiguen cambiar y mantener un estilo de vida saludable.
En referencia a los resultados que obtiene un paciente tras una cirugía, existen muchas variables a tener en cuenta. En gran parte se deben a la adherencia y cumplimiento de las recomendaciones del equipo multidisciplinar. La indicaciones para promover el cambio en el estilo de vida se realizan para afrontar las modificaciones necesarias en los hábitos alimenticios. Las recomendaciones incluyen la realización de actividad física. La modificación tanto del hábito alimenticio como en la actividad física seran fundamentales para mantener los resultados que se consiguen, má alla del primer año tras la intervención.
Cuando una persona accede a una cirugía de obesidad tiene la ilusión de perder rápidamente su sobrepeso. En ocasiones las expectativas en el ritmo de pérdida de peso, al no ser realistas, no se cumplen y los pacientes operados pueden sentirse defraudados y con ello, desmotivarse y no seguir las indicaciones de los equipos multidisciplinares. Craso error!
Más allá de los sentimientos y miedos que acontecen tras una cirugía, los profesionales debemos apoyar a los pacientes y acompañarles para despejar las dudas que aparecen al no verse cumplida su expectativa. En primer lugar, es fundamental trasmitir información correcta para fijar las posibilidades reales que ofrecen la operación. Dado que la pérdida de peso varía en cada paciente y depende de varios factores como peso inicial, edad, sexo, presencia de comorbilidades y hábitos alimenticios. No se conocen los resultados de pérdida en el día a día.
Sabemos que los hombres pueden perder mayor peso que las mujeres y que las personas que tengan mejores hábitos tendrán mejor pérdida de peso.
Las personas con mayor obesidad perderán más peso que las que tienen un menor grado de obesidad. Si un paciente tiene un menor grado de obesidad, el primer mes después de haberse realizado una cirugía bariatrica podrá perder de medio a un kilo por semana.
En general, la mayoría de los pacientes pierden entre 1 y 2 kilos por semana durante la fase inicial. Esto es debido, por supuesto, a una consecuencia de la reducción gástrica y la limitación de la ingesta. Expresado de distinta forma, la pérdida de peso durante el primer mes después de la cirugía es alrededor del 10 y 20% del exceso de tu peso. A los 3 meses, se pierde alrededor del 40% y en 6 meses alrededor del 60% del exceso de su peso. Después bajarán el resto. La mayoría de los pacientes pierden entre el 80 y el 85% del exceso de su peso durante el primer año y medio de cirugía.
Si sigues las indicaciones habitualmente estarás perdiendo, después del segundo mes de la cirugía, entre 2 a 5 kg por mes durante el primer año, aunque siempre la pérdida de peso se debe relacionar con el exceso de peso previo y el grado de obesidad. Habitualmente, los resultados obtenidos en la técnicas más utilizadas en la actualidad durante el primer año a año y medio son aproximadamente el 85% del exceso de peso.
En el segundo año, perderás peso más lentamente o lo mantendrás estable. Lo mas importante es que los pacientes pierden suficiente peso tras la cirugía como para cambiar de manera sustancial su estilo de vida y tener la ocasión para realizar de nuevo actividades que hasta el momento eran imposibles como por ejemplo, atarse los cordones de los zapatos.
